Generalidades De Pimiento
clima
</p>Es un cultivo de clima cálido, para tener un buen desarrollo necesita temperaturas diurnas dentro de los rangos de 20 - 25º C y nocturnas dentro de 16 a 18º C. Cuando la temperatura desciende por debajo de 15ºC, la planta vegeta muy escasamente; entre 8ºC y 10º C los procesos vegetativos se detienen, promoviendo el cuaje de frutos pequeños de mala calidad. Si la antesis se produce a 12º C, y esta temperatura se mantiene durante un par de días, se forman frutos partenocárpicos.
</p>En las zonas templadas y templado-cálidas, se cultivan variedades anual y el trasplante se realiza despues de heladas que terminen las eladas, debido a la sensibilidad al frío. Las altas temperaturas, cuando van acompañadas de humedad relativa baja, provocan la abcisión de flores y frutos recién cuajados; existe tolerancia hasta 40º C cuando la humedad es elevada; las variedades de frutos pequeños son más resistentes al calor. Durante las primeras fases del desarrollo, básicamente en los momentos de floración y cuaje, es fundamental que la humedad del medio ambiente oscile entre valores del 50 a 70%.
</p>El pimiento es una especie exigente en luminosidad durante todo el ciclo vegetativo y la falta de luz provoca ahilamiento, entrenudos largos y tallos débiles. Se han llevado a cabo algunas experiencias en Hungría, duplicando la densidad de plantas por hectárea y se ha observado una disminución del 50%, en el contenido de vitamina C de los frutos (Sánchez - Gómez, 1970). En cuanto al fotoperíodo se comporta como una especie indiferente.
</p>El riego es indispensable en el cultivo de pimiento, es una especie muy sensible a la falta de humedad. El rendimiento se ve afectado cuando el déficit de agua se produce durante la fase de floración hasta la maduración de los frutos. La falta de agua provoca, además, el abarquillamiento de las hojas, el incremento de la pungencia y la aparición en los frutos de una anomalía que desmejora la calidad, conocida como “necrosis apical” o “blossom end rot”
Suelo
</p> El pimiento preferentemente requiere suelos de textura media, sueltos, profundos, ricos en fósforo y nitrógeno y se adapta bien en un rango de pH entre 5,5 y 7 (Vilmorin -Díaz, 1977). Como no tolera salinidad, los rendimientos decaen a partir de 3,5 dS/m de conductividad eléctrica. Deben descartarse los suelos con tendencia al anegamiento, porque necesita buen drenaje, debido a su sensibilidad a la asfixia radicular. La pungencia de los frutos se incrementa en suelos compactos, ligeramente salinos, pobres en nitrógeno y en condiciones de clima seco y cálido (Milla, 1996).